Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades

Aplicación para el Seguro Social por incapacidad y enfermedades||

Hay afecciones temporales o permanentes que pueden reducir la capacidad de una persona de tener un trabajo normal. Pacientes con enfermedades crónicas, degenerativas y psiquiátricas suelen lidiar con períodos de improductividad que les impiden cumplir con sus obligaciones laborales. Para esas personas, solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades puede hacer una gran diferencia en sus vidas.

En casos como estos, se recomienda descansar y seguir el tratamiento médico; algo que podría ser difícil cuando el dinero es un problema. A fin de cuentas, no pagar las facturas médicas puede traer más problemas a la lista. Afortunadamente, hay dos modalidades de la Social Security Administration (SSA) que brindan alivio económico en situaciones como estas: el SSI y el SSDI.

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Si bien son parecidos, los programas SSI y SSDI tienen sus diferencias. Justo esto es lo que les permite cubrir las necesidades económicas de una persona con problemas de salud, independientemente de su condición. Por su importancia, hoy hablaremos sobre cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades, sus requisitos y beneficios.

Aplicación para el Seguro Social por incapacidad y enfermedades

Programas de discapacidad del Seguro Social

En Estados Unidos, hay varias iniciativas que tratan de ayudar a las personas con lesiones, enfermedades o discapacidades a llevar una vida digna, pero hoy nos centraremos en dos: el SSDI (en inglés, Social Security Disability Insurance) y el SSI (Supplemental Security Income). Veamos de qué se tratan.

¿Qué es el Seguro de Discapacidad de la SSA (Social Security Disability Insurance)?

El Seguro de Discapacidad (SSDI) fue fundado en 1974 para unificar una serie de beneficios que ya habían sido otorgados en la década de los 30. Con su creación, el Gobierno pudo reestructurar tanto el reparto de los montos de dinero como los criterios de elegibilidad para ser más justo y cubrir las necesidades de más personas.

Este seguro nacional, gestionado por la SSA, brinda asistencia económica a los asegurados que cumplan con ciertos requisitos, como trabajar durante un período de tiempo determinado, haber aportado al Seguro Social y tener una enfermedad o condición que siga los parámetros de discapacidad de la organización.

Los beneficios se perciben de forma mensual y se mantendrán activos durante el tiempo de recuperación del paciente. En otras palabras, dejarán de repartirse cuando el beneficiario pueda reintegrarse a su vida laboral.

Nota. Con el SSDI, se pueden realizar pagos tanto al asegurado como a los miembros de su familia.

¿Qué es el Programa de Discapacidad del Seguro Social (Supplemental Security Income)?

El Programa de Ingresos Suplementarios (SSI), que beneficia tanto a adultos como a niños, tiene una finalidad similar al SSDI. La primera diferencia entre ellos radica en la vía de financiación. Mientras que los recursos repartidos a través del programa SSDI provienen de los aportes a la Seguridad Social, el dinero del SSI es del erario público.

La segunda diferencia está relacionada con los criterios de elegibilidad. Para calificar al SSI no se debe cumplir con un mínimo de cotizaciones a la Seguridad Social: basta con tener una discapacidad comprobada y un nivel de ingresos limitado.

Diferencias entre el SSDI y el SSI (en un vistazo)

Ahora que ya sabemos un poco sobre el SSDI y el SSI, es momento de conocer sus principales diferencias:

Diferencias entre el SSDI y el SSI
Programa de Discapacidad del Seguro Social

(SSDI)

Programa de Discapacidad del Seguro Social

(SSI)

La financiación proviene de fondos creados con el dinero recolectado a través de los aportes al Seguro Social La financiación proviene del Tesoro, no de los fondos de la SSA
Los pagos mensuales se calculan tomando en cuenta las ganancias que haya reportado una persona a lo largo de su vida laboral Los pagos mensuales no tienen nada que ver con los ingresos históricos del beneficiario. Se calculan basándose en sus necesidades
Más que un programa, es un seguro diseñado para los trabajadores que aportan a la Seguridad Social Es un programa de asistencia pública que no requiere que el beneficiario tenga determinado historial laboral o aporte a la Seguridad Social
Ayuda económicamente a las personas que no puedan trabajar, independientemente de sus recursos financieros, ingresos o ahorros Ayuda económicamente a las personas que no puedan trabajar. Para ser declarados como beneficiarios, deben cumplir con ciertos límites de ingresos y ahorros
Beneficia a los trabajadores o adultos discapacitados desde la infancia, siempre que estén asegurados Beneficia a los niños y adultos con necesidades económicas y afecciones discapacitantes. Deben tener ingresos y recursos limitados

Requisitos para solicitar Seguro Social por incapacidad

Los requisitos para solicitar Seguro Social por incapacidad varían dependiendo de la modalidad. No obstante, hay algunos que son comunes entre ellos, como el concepto de discapacidad de la SSA y el listado de enfermedades. Antes de hablar sobre el procedimiento de solicitud, revisemos estos puntos:

¿Qué es una discapacidad para la SSA?

La SSA tiene sus propios parámetros para determinar si una enfermedad o lesión es discapacitante. Para que una persona sea declarada como discapacitada, debe cumplir con cinco criterios esenciales:

  • Tener una o varias de las enfermedades que se incluyen en las listas de la SSA.
  • Que esa enfermedad le genere al solicitante una discapacidad total. No se admiten las discapacidades parciales o temporales.
  • Que el grado de la afección sea un impedimento para trabajar en el mismo puesto o sector en que venía desarrollándose anteriormente.
  • Que el paciente no pueda encontrar otro trabajo debido a su condición médica.
  • Que la discapacidad dure un año (como mínimo) o que sea lo suficientemente peligrosa como para causar la muerte.

La Seguridad Social diferencia también entre afecciones graves y discapacidades. Las afecciones graves suelen limitar algunas actividades, como caminar, estar sentado o de pie, alzar peso, etc. Los fallos en la memoria entran dentro de esta categoría. Las discapacidades se determinan mediante una lista que veremos más adelante.

Seguro Social por incapacidad: lista de enfermedades

La lista de discapacidades de la SSA se divide en dos: Parte A y Parte B. La Parte A contiene los criterios de elegibilidad para adultos y niños, mientras que la Parte B solo aplica para menores de los 18 años de edad.

En sí, la lista de enfermedades del Seguro Social describe cuáles son las afecciones y discapacidades que la SSA considera lo suficientemente graves como para impedir el mantenimiento de un trabajo normal o el desarrollo de cualquier otra actividad lucrativa, como trabajar desde casa o ganar dinero en línea.

La mayoría de las enfermedades son permanentes, lo que quiere decir que limitarán el desarrollo profesional y la capacidad de ganar dinero de una persona por un tiempo prolongado (mayor a un año).

Seguro Social por incapacidad: enfermedades de la Parte A

La Parte A de la lista de discapacidades del Seguro Social se divide en varios apartados. Cada sección corresponde a una clasificación médica específica que puede afectar tanto a niños como a adultos. Puedes ver el listado completo aquí.

Lista de enfermedades del Seguro Social: Parte A
Clasificación Ejemplos de enfermedades
Trastornos musculoesqueléticos
  • Amputación
  • Fracturas óseas
  • Artritis inflamatoria
  • Curvaturas de la columna vertebral
  • Quemaduras y otras lesiones de los tejidos blandos
  • Anormalidad en una articulación principal de cualquier extremidad
  • Trastornos de la columna esquelética que comprometan la raíz nerviosa
  • Estenosis espinal lumbar que comprometa las extremidades inferiores
  • Cirugía reconstructiva en una articulación principal de las extremidades inferiores
Afecciones de los sentidos y el habla
  • Ceguera
  • Pérdida de la agudeza visual
  • Hipoacusia
  • Implantes oculares
  • Sordera
  • Pérdida de la capacidad de audición
  • Pérdida o problemas del habla
Trastornos respiratorios
  • Asma
  • Fibrosis pulmonar
  • Bronquitis crónica
  • Hipertensión pulmonar
  • Falla respiratoria
  • Infección de neumococo
  • Trasplante de pulmón
Trastornos y afecciones del sistema cardiovascular
  • Falla coronaria
  • Arritmias recurrentes
  • Enfermedad cardíaca
  • Trasplante de corazón
  • Insuficiencia venosa crónica
  • Enfermedad arterial periférica
  • Disfunción ventricular
  • Síncope
Trastornos del sistema digestivo
  • Hemorragia gastrointestinal
  • Disfunción hepática
  • Enfermedad inflamatoria
  • intestinal
  • Desnutrición
  • Síndrome del intestino corto
  • Obstrucción intestinal
Trastornos genitourinarios
  • Glomerulonefritis
  • Nefropatía hipertensiva o diabética
  • Uropatía obstructiva crónica
  • Nefropatías hereditarias
  • Síndrome de cólico nefrítico
  • Cualquier otra enfermedad renal crónica
Trastornos hematológicos
  • Trombosis
  • Anemia hemolítica
  • Insuficiencia de la médula ósea
  • Problemas con el volumen plaquetario
Trastornos de la piel
  • Ictiosis
  • Ulceraciones
  • Infecciones crónicas de piel
  • Dermatitis supurativa
  • Fotosensibilidad genética
  • Quemaduras
Trastornos endocrinos
  • Trastornos en la pituitaria
  • Trastornos de la tiroides
  • Trastorno de la paratiroides
  • Trastorno de la glándula suprarrenal
  • Diabetes
  • Trastornos del páncreas
  • Hiperglucemia
  • Cetoacidosis diabética
  • Hipoglucemia crónica
Trastornos congénitos
  • Síndrome de Down en mosaico
  • Síndromes dismórficos
  • Síndromes metabólicos innatos
  • Discapacidad por una infección perinatal
Trastornos neurológicos
  • Epilepsia
  • Esclerosis lateral amiotrófica
  • Estado vegetativo persistente
  • Alzheimer
  • Parkinson
  • Deterioro mental grave
Trastornos mentales
  • Esquizofrenia
  • Trastorno bipolar
  • Trastorno obsesivo compulsivo
  • Trastorno del espectro autista
  • Depresión mayor
  • Depresión postparto
  • Otros trastornos intelectuales, emocionales o de la personalidad
Cáncer
  • Cáncer de cabeza
  • Cáncer de cuello
  • Cáncer de piel
  • Cáncer glandular
  • Leucemia
  • Linfoma
  • Mieloma
  • Cáncer en la tiroides
  • Cáncer de mama
  • Sarcoma
  • Cáncer cerebral
  • Cáncer de esófago
  • Cáncer intestinal
  • Cáncer estomacal
  • Cualquier otro tipo de cáncer, especialmente si es inoperable, no tratable o está en metástasis
Trastornos inmunológicos
  • Trastornos autoinmunes, como el lupus, la vasculitis, etc.
  • Trastornos por inmunodeficiencia, como los causados por el virus VIH/SIDA

Seguro Social por incapacidad: enfermedades de la Parte B

La Parte B incluye criterios médicos adicionales o complementarios a la Parte A que le sirven a los especialistas de la Seguridad Social para determinar que una persona menor de 18 años califica para recibir un beneficio económico. Puedes ver el listado completo aquí.

Lista de discapacidades para el Seguro Social: Parte B
Clasificación Ejemplos de enfermedades
Bajo peso al nacer o problemas de crecimiento
  • BPN o FTT hasta la edad de 3 años con o sin causa conocida
Trastornos musculoesqueléticos
  • Trastornos de la columna vertebral que afecten el funcionamiento de toda o parte de la espalda o el de las extremidades
  • Lesiones en los tejidos blandos, incluyendo quemaduras
  • Paraplejia, cuadriplejia, entre otros
  • Fracturas que no cicatrizan
Enfermedades o limitaciones especiales o del habla
  • Pérdida de la agudeza visual
  • Contracción del campo visual del ojo
  • Pérdida de la eficiencia visual
  • Pérdida auditiva que pueda o no pueda tratarse con un implante coclear
  • Deficiencias en la percepción de cualquier sentido del organismo
Enfermedades respiratorias
  • Deficiencias del sistema respiratorio
  • Trastornos respiratorios crónicos
  • Asma
  • Fibrosis quística
  • Trasplante de pulmón
  • Insuficiencia respiratoria
Enfermedades cardiovasculares
  • Insuficiencia cardíaca crónica
  • Arritmias recurrentes
  • Enfermedades congénitas del corazón
  • Trasplante de corazón
Enfermedades del sistema digestivo
  • Deficiencia de absorción nutricional
  • Hemorragia gastrointestinal que requiera transfusión de sangre
  • Enfermedades hepáticas crónicas
  • Enfermedad inflamatoria intestinal
  • Síndrome del intestino corto
  • Trasplante de hígado
  • Alimentación diaria suplementaria por vía no oral a causa de problemas gástricos
Trastornos genitourinarios
  • Enfermedad renal crónica
  • Enfermedad renal que requiera hemodiálisis
  • Trasplante de riñón por enfermedad crónica
  • Síndrome del cólico nefrítico
  • Trastornos genitourinarios congénitos
Trastornos hematológicos
  • Anemia hemolítica
  • Trastornos que requieran un trasplante de médula ósea
  • Trombosis y enfermedades similares
  • Malfunción de los glóbulos rojos o blancos
Trastornos y enfermedades de la piel
  • Ictiosis
  • Lepra
  • Dermatitis crónica
  • Infecciones en la piel
  • Fotosensibilidad genética
Trastornos endocrinos
  • Diabetes Mellitus
  • Hipotiroidismo
  • Hipertiroidismo
  • Trastornos en la glándula pituitaria
  • Trastornos en las glándulas suprarrenales
  • Hiperglucemia
  • Hipoglucemia
  • Cetoacidosis diabética
Trastornos y enfermedades neurológicas
  • Epilepsia
  • Parálisis cerebral
  • Tumores cerebrales benignos
  • Trastornos de la médula espinal
  • Trastornos neurodegenerativos (como la enfermedad de Huntington)
Trastornos congénitos que afectan múltiples sistemas corporales
  • Síndrome de Down sin mosaico
  • Síndrome de Patau
  • Enfermedad de Tay-Sachs
Trastornos mentales
  • Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos
  • Ansiedad
  • Trastornos obsesivos compulsivos
  • Trastornos de la personalidad
  • Autismo
  • Trastornos depresivos
  • Trastorno bipolar
Cáncer
  • Linfoma
  • Leucemia
  • Tumores malignos
  • Neuroblastoma
  • Retinoblastoma
  • Otros tipos de cáncer, en especial si están en metástasis, son inoperables o no tratables con quimioterapia y radioterapia
Trastornos del sistema inmunológico
  • Vasculitis
  • Lupus
  • Esclerosis múltiple
  • VIH / SIDA

¿Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad? Preparación preliminar

Lo primero que se debe hacer para solicitar el SSI o SSDI es obtener un diagnóstico médico completo, es decir, reunir suficientes pruebas científicas que confirmen que el solicitante sufre de una enfermedad catalogada por la Administración del Seguro Social como incapacitante. Sin embargo, algunas afecciones, -como la esclerosis lateral amiotrófica y varios tipos de cáncer- tan solo requieren una prueba diagnóstica.

Si la enfermedad diagnosticada no forma parte de la lista de condiciones compasivas (enfermedades demasiado graves como para alargar el proceso de evaluación de la SSA), entonces se debe revisar si cumple con las condiciones y criterios médicos establecidos en la Parte A o Parte B. Este puede ser el paso más complejo porque podría requerir que se realicen muchas más pruebas y análisis costosos.

Si no se tiene suficiente dinero, todavía se puede solicitar el beneficio, pero los solicitantes tendrán que esperar a que la Administración de la Seguridad Social organice una cita médica para una evaluación completa. La parte buena de todo esto es que la SSA correrá con todos los gastos.

Una vez que se tenga un diagnóstico acertado y completo a la mano, lo único que faltaría es revisar los requisitos de elegibilidad y presentar la solicitud. Para ello, primero debes saber si te corresponde solicitar el SSI o el SSDI. Luego, rellenar las planillas, algunas de ellas disponibles en línea, y esperar la evolución del estudio del trámite.

Nota. Si una enfermedad no aparece en el libro azul, es decir, la Parte A y la Parte B de la SSA, todavía es posible recibir beneficios del Seguro Social. La migraña, por ejemplo, no está incluida en la lista de enfermedades del Seguro Social, pero si los síntomas son tan fuertes que le impiden al paciente llevar una vida normal, la SSA podría igualarla a una enfermedad similar y así aprobar los beneficios.

Consejos para solicitar el Seguro Social por incapacidad

Si no quieres perder tiempo en la solicitud, te recomendamos seguir los siguientes pasos:

  • Reúne toda la información médica que tengas a la mano, incluyendo los documentos, informes de especialistas, pruebas médicas, etc., que soporten el diagnóstico. Si puedes adjuntarlas a la solicitud, ¡hazlo!
  • Verifica que tu enfermedad está incluida en el libro azul de la SSA. Recuerda que la Parte A aplica para niños y adultos, y la Parte B solo para menores a los 18 años.
  • Analiza tu caso particular para determinar si te corresponde solicitar el SSDI o el SSI. El primero es para personas que hayan cotizado al Seguro Social y que cumplan con los requisitos de empleo previo. La segunda se determina por los ingresos de la familia.
  • Completa y envía tu solicitud. Más adelante te explicaremos cómo hacerlo en cada caso.
  • Espera la evaluación de la Administración de la Seguridad Social. Recuerda que la SSA podría solicitar más documentación, hacer una evaluación médica independiente, pedir nuevas pruebas diagnósticas, etc.

Evaluación de la incapacidad o enfermedad por la Seguridad Social

El proceso de evaluación de la Seguridad Social para aprobar la solicitud de los beneficios por enfermedades o discapacidad es multifactorial, es decir, incluye el estudio y consideración de varios elementos. La Administración de la Seguridad Social tendrá que analizar objetivamente:

  • Qué actividad laboral tenía el solicitante
  • Si puede o no trabajar en otro puesto o sector
  • Cuál es el nivel de gravedad del impedimento
  • Si su enfermedad está incluida en la lista de discapacidades
Los procesos de evaluación se acortan al máximo en dos casos: cuando se trata de subsidios compasivos (es decir, que la enfermedad es demasiado grave como para que el paciente espere la resolución de la SSA) o en casos de ceguera.

La SSA considera que una persona es legalmente ciega cuando su visión no supera los 20/200 o si su campo visual se reduce a los 20 grados o menos, incluso con anteojos correctivos. Por tanto, no necesariamente se debe estar completamente ciego para recibir los beneficios del Seguro Social.

Nota: Las personas que no cumplen con la definición legal de ceguera de la Administración del Seguro Social aún pueden calificar para los beneficios, pero siempre que sus problemas de visión, solos o combinados con otras enfermedades, le impidan mantener un empleo.

Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad SSDI (seguro para trabajadores)

Los interesados pueden solicitar el Seguro Social por incapacidad SSDI en línea ingresando a este enlace. Si no es posible presentar la solicitud en línea, se puede activar el proceso por vía telefónica llamando al 1-800-772-1213 de lunes a viernes, de 8:00 a. m. a 7:30 p. m. Las personas con sordera u otros problemas de audición pueden comunicarse al número TTY 1-800-325-0778.

¿Quién puede aplicar a los beneficios del Seguro Social SSDI?

En general, cualquier persona que cumpla con los requisitos de elegibilidad. Sin embargo, las aplicaciones en línea están limitadas a personas mayores a los 18 años que actualmente no reciban beneficios del Seguro Social o que no tengan su propio registro.

Es importante que el solicitante cumpla con la condición de no poder trabajar debido a una condición médica discapacitante y que esta enfermedad lo limite por al menos 12 meses o, en su defecto, lo exponga a un peligro real de fallecimiento.

También es importante que la Administración de la Seguridad Social no le haya denegado una solicitud anterior en los últimos 60 días. En este caso, aplica la apelación.

Otros requisitos de elegibilidad para solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades SSDI

Para poder calificar al SSDI, necesitas comprobar también que has trabajado y cotizado al Seguro Social (impuestos al trabajo o FICA) por al menos 5 de los últimos 10 años.

El número de créditos laborales (cotizaciones) requeridas se mantiene intacto cada año. Generalmente, se necesitan 40 créditos laborales para poder solicitar el SSDI y 20 de estos créditos deben haber sido aportados en los últimos 10 años. Sin embargo, hay algunas excepciones: en ciertos casos, los trabajadores más jóvenes pueden calificar sin tener que cumplir con este requisito.

Nota. Para el 2021, obtendrás un crédito por cada $1,470 que recibas por concepto de salario.

¿Necesito ser ciudadano americano para solicitar el SSDI?

No necesariamente. La Administración de la Seguridad Social acepta solicitudes de ciudadanos americanos o extranjeros residentes, siempre que se cumplan con las condiciones previamente estipuladas: tener una enfermedad o afección que limite su vida laboral y haber trabajado y cotizado al Seguro Social por una cantidad de tiempo lo suficientemente larga como para estar calificado.

¿Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad SSDI en línea?

Después de revisar que la condición médica se encuentra en la lista de enfermedades del Seguro Social, entra en el enlace de la aplicación al SSDI en línea y completa la solicitud. No olvides llenar y firmar el formulario de autorización que te arrojará el sistema, ya que esto le permite a la SSA solicitar todo tu expediente médico.

Para aplicaciones del SSDI en línea, te recomendamos tener a la mano los siguientes documentos o información:

  • Número de Seguro Social
  • Fecha y lugar de nacimiento
  • Nombres y fechas de nacimiento de tus hijos menores de edad, de tenerlos
  • Nombre, número de Seguro Social y fecha de nacimiento o edad de tu cónyuge -de tenerlo- y también de cualquier excónyuge
  • Número de ruta del banco y número de la cuenta bancaria donde deseas recibir los beneficios
  • Nombre, dirección y número de teléfono de cualquier persona que esté familiarizada con tus afecciones médicas (puede ser un amigo cercano o familiar)
  • Información detallada de las enfermedades, lesiones o afecciones limitantes
  • Nombre e información detallada de todas las clínicas, hospitales o consultorios que te hayan atendido; incluyendo la identificación de los médicos, medicamentos recetados, fechas de las consultas o recetas, fechas de las pruebas médicas, entre otros datos relevantes
  • Cantidad de dinero que has percibido por tu trabajo entre el año anterior a la solicitud y el año de la solicitud
  • Nombre y dirección de tu empleador
  • Copia de tu Declaración del Seguro Social
  • Fechas de inicio y finalización de tu servicio militar activo, de ser el caso
  • Lista de hasta 5 trabajos que hayas tenido en los últimos 15 años y sus fechas de inicio y finalización
  • Información sobre cualquier beneficio o compensación que hayas recibido en el trabajo, en especial si están relacionados con reposos o períodos de discapacidad
  • Tu certificado de nacimiento y el de tus hijos
  • Prueba de ciudadanía estadounidense o de residencia legal (este último solo para extranjeros)
  • Formularios W-2 o declaraciones de impuestos sobre ingresos al trabajo del año anterior a la solicitud
  • Toda la evidencia médica que esté en tus manos y que te ayude a soportar el diagnóstico
  • Recibos de pago o cualquier otra documentación relacionada con los ingresos que hayas percibido por parte de tu empleador

Después de presentar tu solicitud, recibirás una carta de recepción por correo electrónico o correo postal. Puedes ingresar a My Social Security para revisar el estado de la solicitud, aunque te recomendamos estar pendiente de tu bandeja de entrada física o electrónica.

¿Cómo aplicar al Seguro Social por incapacidad SSDI en persona?

Si quieres completar tu solicitud en persona, necesitas llamar al 1-800-772-1213 o al TTY 1-800-325-0778 para pedir una cita. El agente programará la fecha y hora de la cita en la oficina del Seguro Social más cercana a tu domicilio.

Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad SSI (programa federal para personas con ingresos limitados)

Como dijimos anteriormente, el Seguro Social de Ingreso Suplementario (SSI) está disponible para adultos y niños que tengan alguna de las enfermedades discapacitantes reglamentadas por la Administración del Seguro Social y que, por cualquier causa, no cumplan con el historial de empleo del SSDI. Para poder acceder al beneficio, deben demostrar que sus ingresos son limitados.

¿Quién puede solicitar los beneficios del Seguro Social SSI?

En general, cualquier persona que cumpla con los requisitos de elegibilidad que expondremos a continuación. Es importante tener en cuenta que hay factores que podrían afectar tu elegibilidad, como el estado civil, la cantidad de ingresos que recibas mes a mes y el saldo de tus cuentas bancarias.

Requisitos de elegibilidad para solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades SSI

Para poder solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades SSI, necesitas cumplir con ciertos requisitos de elegibilidad, como los siguientes:

  • Tener al menos 65 años de edad
  • Si no se tienen 65 años de edad o más, ser ciego o discapacitado
  • No recibir suficientes ingresos mensuales o no tener suficiente dinero como para llevar una vida digna
  • Vivir en alguno de los 50 estados del país, el Distrito de Columbia o las Islas Marianas del Norte. Este requisito queda excluido para los hijos de padres que estén en servicio militar activo y que, en consecuencia, hayan sido asignados a una misión fuera de los Estados Unidos

Si lo prefieres, puedes hacer el cuestionario en línea de Benefits.gov para saber si eres o no elegible para recibir los beneficios suplementarios del Seguro Social.

¿Cuánto dinero tengo que ganar para recibir el SSI en USA? Límite de ingresos

Para calificar al SSI, tus ingresos deben estar dentro del límite permitido por la Administración de la Seguridad Social. El límite de ingresos que maneja la SSA se basa en una tasa federal. En 2021, un solicitante soltero no debe ganar más de $1,310 al mes. En caso de que se trate de una persona con ceguera, este límite aumenta hasta $2,190.

Cuando se trata de niños con enfermedades discapacitantes, la SSA evalúa el ingreso mensual de la familia restándole un monto específico que se destinaría al mantenimiento de sus padres y hermanos. Esto reduce los ingresos familiares notablemente, dándole al niño solicitante la oportunidad de recibir la ayuda económica del Seguro Social.

Ahora que ya conoces el límite de ingresos para acceder al Seguro Social Suplementario, hablemos del límite de activos. Por ley, la SSA establece que, para calificar, el solicitante debe tener menos de $2,000 en activos (en caso que sea soltero) o $3,000 (en caso que sea casado). Para el cálculo de este monto se excluye el saldo de las cuentas ABLE (cuentas de ahorro para personas discapacitadas).

También se excluyen otros activos del límite de $2,000 o $3,000 interpuesto por la SSA, como, por ejemplo:

  • El valor de la residencia principal
  • El costo de los vehículos especiales para discapacitados
  • Los anillos de boda y de compromiso
  • Ahorros funerarios (hasta $1,500)

¿Cómo solicitar el Seguro Social por incapacidad SSI en línea?

Después de verificar si eres o no elegible para el SSI, entra en el enlace de la aplicación al SSI en línea y completa la solicitud. Tal como en el caso anterior, es importante que no olvides llenar y firmar el formulario de autorización que te arrojará el sistema, ya que esto le permitirá a la SSA solicitar todo tu expediente médico.

Para aplicaciones del SSI en línea, te recomendamos tener a la mano los siguientes documentos o información:

  • Número de Seguro Social
  • Comprobante de edad, es decir, documentos donde se pueda verificar tu fecha de nacimiento, como un certificado de nacimiento, una identificación con foto emitida por el gobierno de los Estados Unidos, etc.
  • Prueba de ciudadanía o residencia, esto en caso que seas extranjero.
  • Comprobantes de ingresos. Puedes usar tus recibos de pago y las últimas declaraciones del impuesto federal sobre la renta
  • Comprobante de bienes, es decir, estados de cuentas bancarias, registros de carros, lista de propiedades inmobiliarias, entre otros
  • Comprobante del tipo de vivienda. Si es propia, el documento de propiedad. Si tienes hipoteca, el documento del préstamo hipotecario. Si es alquilada, el contrato de alquiler. También te servirán la factura de impuestos a la propiedad y las facturas de servicios públicos
  • Expediente médico, incluyendo reportes, consultas, diagnósticos, antecedentes médicos, información de los proveedores de salud visitados, recetas de medicamentos, etc.
  • Historial laboral, es decir, nombre de los empleadores que hayas tenido en los últimos 5 años, horas trabajadas y una breve descripción de las actividades laborales en las que te has desempeñado

Después de presentar tu solicitud, recibirás una carta de recepción por correo electrónico o correo postal. Puedes ingresar a My Social Security para revisar el estado de la solicitud, aunque te recomendamos estar pendiente de tu bandeja de entrada física o electrónica.

¿Cómo aplicar al Seguro Social Suplementario por incapacidad por teléfono?

Si quieres completar tu solicitud al SSI por teléfono, deberás llamar a la oficina del Seguro Social más cercana a tu domicilio. En este caso, el agente programará una cita telefónica y te indicará qué documentos debes enviar por correo postal.

¿Cómo aplicar al Seguro Social Suplementario por incapacidad o SSI en persona?

Si quieres completar tu solicitud en persona, necesitas llamar al 1-800-772-1213 o al TTY 1-800-325-0778 para pedir una cita. El agente programará la fecha y hora de la cita en la oficina del Seguro Social más cercana a tu domicilio.

¿Cuánto se puede ganar para no perder los beneficios por incapacidad del Seguro Social?

El límite de ingresos mensual para no perder el SSI es de $794 al mes para personas solteras y $1,191 para personas casadas (siempre que el cónyuge no reciba beneficios por incapacidad).

¿Los cupones de alimentos cuentan para los límites de ingresos de la SSA?

No. El Seguro Social no cuenta todos tus ingresos y ayudas familiares percibidas para el cálculo del límite de ingresos. Dentro de los ingresos no contables encontramos las exclusiones al salario, los reembolsos de impuestos, los cupones de alimentos y cualquier otra ayuda federal o estatal que se reciba por estado de necesidad.

Además, debes recordar que el Seguro Social te permitirá deducir los gastos laborales y otros relacionados, como el costo de un transporte especial por tu condición médica.

¿Qué son las exclusiones al salario del Seguro Social?

Para poder mantener tus beneficios de ingresos suplementarios (SSI), debes cumplir con un límite de ingresos mensuales. Ahora bien, como ya hemos expuesto, no todos tus ingresos contarán para el cálculo de este límite. Las exclusiones al salario son tan solo una de las excepciones.

Por ley, el Seguro Social excluirá los primeros $85 de los ingresos laborales y la mitad de todo lo que supere esos $85 en un mes. Esto significa que puedes ganar cerca de $1,650 y aún calificar para los beneficios del SSI. Lo que sucederá en este caso es que una parte de tus beneficios se verán recortados.

Veámoslo en un ejemplo para comprenderlo mejor. Supongamos que ganas $1,200 al mes. El Seguro Social ignora por ley los primeros $20, dejándote un monto de $1,180. Luego, aplica una excepción especial para restar $65, por lo que quedarían $1,125. Para culminar, el Seguro Social dejará de lado la mitad de las ganancias, lo que nos daría un monto base de $562.50, es decir, un monto que está por debajo de $794. Esos $562.50 serán restados de tus beneficios mensuales, dejándote con un monto mensual de SSI de $231.40.

¿Cuándo solicitar el Seguro Social por incapacidad y enfermedades?

Lo ideal sería aplicar tan pronto como la enfermedad haya sido diagnosticada, esto para no perder tantos beneficios. Si no tienes todos los documentos en seguida, no te preocupes. Puedes programar una cita dentro de 60 días continuos llamando por teléfono. En este caso, la SSA tomará la fecha de la llamada como la fecha de solicitud, lo que te haría ganar tiempo extra sin poner en jaque la cantidad de beneficios recibidos.

¿Qué hacer cuando una solicitud del Seguro Social por incapacidad es denegada?

Todos los solicitantes a los beneficios por incapacidad del Seguro Social, ya sea SSI o SSDI, pueden apelar la decisión. Para ello, tendrás 60 días continuos a partir de la recepción de la decisión de la Administración de la Seguridad Social. El proceso apelatorio se compone de cuatro niveles:

  • Reconsideración (que se hace ante la misma oficina de la Seguridad Social)
  • Petitorio de audiencia en un juzgado de derecho administrativo.
  • Revisión ante el Consejo de Apelaciones del Seguro Social
  • Revisión del caso por los tribunales federales
La comunicación de la SSA contendrá todos los tipos de apelación que puedes presentar, sus plazos perentorios e instrucciones. Recuerda que puedes presentar tu apelación en línea o descargar los formularios en www.ssa.gov/forms.

¿Cuánto paga el seguro social por incapacidad?

El monto de tus beneficios dependerá de si solicitas el programa federal de ingresos suplementarios (SSI) o el Seguro Social por Discapacidad (SSDI). El nuevo monto máximo de beneficios del SSI para el 2021 es de $794 por persona y $1,191 por pareja. Este monto puede aumentar si el estado en el que vives otorga suplementos al SSI.

En el seguro por discapacidad (SSDI) el cálculo es más complejo porque dependerá de los ingresos del beneficiario y también de sus cotizaciones. No obstante, el promedio mensual nacional del SSDI se ubica en $1,277.

Cuánto paga el seguro social por incapacidad

Preguntas frecuentes sobre el Seguro Social por incapacidad

El tema del Seguro Social por Incapacidad es complejo porque tiene varios detalles a tomar en cuenta. Pensando en las dudas que podrías tener, hemos preparado una sección de preguntas frecuentes. Revísala con lupa antes de presentar tu solicitud.

¿Qué es discapacidad según la Seguridad Social?

Como hemos expuesto anteriormente, la SSA considera como discapacidad a cualquier enfermedad o condición médica que le impida a una persona ejercer una actividad lucrativa, ya sea por tener un impedimento físico o mental. Para que una enfermedad de la lista del Seguro Social sea considerada discapacidad, debe tener una duración mayor a un año o poner al paciente en peligro de muerte.

Cuando hablamos de niños, se considera discapacidad a cualquier enfermedad o afección que limite física o mentalmente a una persona menor a los 18 años. Esta condición debe ser médicamente determinable y causar una limitación funcional moderada o grave, independientemente de su tiempo de duración.

Por tanto, podríamos concluir que una de las diferencias entre las dos definiciones de discapacidad (para niños y adultos) es que, en el primer caso, se exime el requisito de duración. Un niño con una enfermedad grave no necesita comprobar que su condición no cambiará durante 12 meses o más para recibir el beneficio: basta con que el impedimento sea continuo.

¿Cuándo una persona es considerada niño por la Seguridad Social?

Toda persona que tenga 18 años de edad o menos entraría dentro de la calificación de niño de la Seguridad Social, independientemente del tipo de beneficio del que estemos hablando: SSDI o SSI.

¿A qué se refiere la ley con “médicamente determinable”?

Cuando una persona reclama beneficios por discapacidad, debe tener un impedimento que pueda ser verificado a través de evidencia médica. En otras palabras, la anomalía, cualquiera que esta sea, debe poder demostrarse a través de pruebas diagnóstico, exámenes de laboratorio o técnicas de evaluación aceptadas en el mundo científico. No es suficiente elaborar un listado de síntomas para la SSA: la discapacidad debe ser comprobable y comprobada por expertos.

¿Puedo acceder a Medicare si reclamo el Seguro Social por discapacidad?

Sí, pero no de forma inmediata. Para ello, el beneficiario debe recibir una compensación económica por SSI o SSDI durante un mínimo de 24 meses. Todo aquel que cumpla con las condiciones, independientemente de su edad, será elegible para Medicare automáticamente.

¿Qué pasa con Medicare cuando se pierden los beneficios por incapacidad del Seguro Social?

Si pierdes tus beneficios SSDI, podrás seguir disfrutando de la cobertura Medicare. Esto es posible gracias a un período extendido de la elegibilidad que se conoce como incentivo laboral. Los incentivos laborales son muy importantes, en especial en materia de salud. Muchas personas con enfermedades crónicas o discapacitantes tienen miedo de volver a su vida laboral cuando se sienten mejor porque, si lo hacen, podrían perder su Medicare y con ello, su único seguro médico.

¿Qué son los incentivos laborales del Seguro Social?

Uno de los objetivos principales de la Administración de la Seguridad Social es tratar de que el beneficiario sea completamente independiente. Es por ello que anima a los solicitantes a encontrar un empleo que se ajuste a su condición médica y que no agrave el grado de su afección.

Durante los incentivos laborales, los beneficiarios del SSI o SSDI podrán seguir recibiendo ayuda económica de la SSA, así como disfrutar de su afiliación a Medicaid, por poner algunos ejemplos. Dentro de los incentivos laborales ofrecidos por la SSA, encontramos los siguientes:

  • Deducción de los gastos comerciales, es decir, aquellos que se realizan para que el beneficiario pueda trabajar por cuenta propia, como una computadora, por ejemplo.
  • Permisión de los intentos fallidos de trabajo. Si un beneficiario que vuelve a reinsertarse en la vida laboral nota que no puede cumplir con sus obligaciones, no tendrá que aplicar de nuevo al Seguro Social. (Plazo de 6 meses)
  • Pagos mensuales extendidos para aquellos que ya no califiquen para una discapacidad del Seguro Social, pero que se mantengan dentro de un programa de VR aprobado por la Administración de la Seguridad Social.
  • Plan de autosuficiencia y ahorro para el logro de una meta específica, como volver a la universidad o completar la escuela secundaria.
  • Período probatorio de trabajo. La SSA le dará al beneficiario un lapso de 9 meses sin reducción de Medicaid o sus beneficios para saber si se adapta a su nueva vida laboral.
  • Continuación de la cobertura de Medicaid. La SSA, independientemente de su condición, puede extender hasta por 93 meses la afiliación a Medicare Parte A, Parte B y Parte D.
  • Restablecimiento de beneficios. Si un beneficiario pierde sus beneficios y la misma u otra enfermedad vuelve a afectarlos dentro de los 12 meses siguientes, podrá solicitar de nuevo la ayuda económica sin tener que pasar por todo el procedimiento desde cero.

Puedes ver la lista de todos los incentivos laborales visitando esta sección de la SSA.

¿Cómo saber si califico para el SSI o SSDI?

Si después de leer los requisitos de elegibilidad de la guía, todavía tienes dudas, ¡no te preocupes! Hay un test en línea que podría ayudarte a determinar si calificas. Si reservas unos 5-15 minutos para responder el cuestionario, descubrirás si eres elegible o no para el SSI o SSDI.

¿La Seguridad Social puede revisar mis beneficios?

De hecho, sí. La Seguridad Social se reserva el derecho de revisar tu caso periódicamente para ver si aún calificas para los beneficios por discapacidad. Durante la evaluación, el representante solicitará los últimos informes médicos, pruebas de laboratorio, exámenes diagnósticos, entre otros.

Si el evaluador considera que las pruebas documentales y la entrevista a los médicos tratantes no son suficientes para confirmar la discapacidad, podría solicitar evidencia médica complementaria. Afortunadamente, no tendrás que pagar nada: todo correrá a cargo del Seguro Social.

¿Cada cuánto tiempo revisan los casos de discapacidad?

La Seguridad Social suele revisar cada caso cada tres años, pero todo dependerá de la gravedad y duración de la afección médica. Si los evaluadores no esperan una mejoría, podría extender este tiempo a 7 años.

¿Qué evalúa la SSA durante la evaluación de discapacidad?

Aunque las evaluaciones de la SSA parecen complicadas, son bastante sencillas. El evaluador querrá saber si tu condición médica ha mejorado o empeorado, si todavía estás imposibilitado para trabajar y si, en su opinión como experto, debería seguir recibiendo los beneficios por discapacidad.

¿Puedo trabajar si recibo beneficios SSI del Seguro Social?

Cuando un beneficiario comienza a trabajar, debe reportarlo de forma inmediata a la Administración del Seguro Social, pero no por ello perderá sus beneficios automáticamente. La SSA le da a cada beneficiario un período probatorio de 9 meses para que evalúe si realmente puede continuar con el trabajo. Muchas personas con discapacidades piensan que ya están mejor y que pueden reactivar su vida laboral. Sin embargo, comienzan a notar que es casi imposible mantener su empleo por su propia enfermedad o limitación.

Durante esos 9 meses, el beneficiario seguirá recibiendo los beneficios del Seguro Social por incapacidad. Al término de los 9 meses, la SSA reevaluará el caso, prestando atención tanto a la condición médica como al salario. Si el beneficiario gana más de $940 (para el año 2021), los beneficios expiran por completo. Si gana menos de eso, continuará recibiendo los beneficios.

¿Puedo volver a solicitar los beneficios de la SSDI?

Sí. Si pierdes tu empleo después de reinsertarte a la vida laboral, podrás acogerte a los beneficios por incapacidad sin tener que comenzar el proceso desde cero. No obstante, esta excepción solo aplica para los períodos probatorios y para los incentivos laborales de 12 meses.

¿Por qué la Seguridad Social demora tanto para aprobar mis beneficios?

La decisión de otorgar beneficios suplementarios por incapacidad dependen exclusivamente del tipo de enfermedad o discapacidad que tenga el solicitante. Hay impedimentos que se demoran más que otros en ser evaluados, como las lesiones causadas por un accidente traumático o derrames cerebrales, por poner tan solo algunos ejemplos.

¿Qué diferencia hay entre estos casos y otros? Pues, principalmente, que después de un accidente, derrame o similar los pacientes suelen mostrar una mejoría notable, especialmente durante los primeros tres meses. Es por ello que la SSA ha tomado como política revisar casos como estos después de los tres meses de la solicitud; esto para ahorrarse tiempo en la evaluación médica diagnóstica.

Las listas de enfermedades del Seguro Social suelen incluir también enfermedades de aprobación casi inmediata, como muchos tipos de cáncer, condiciones médicas raras, entre otros. A estas afecciones se les denomina casos de compasión. Entre otras razones que pudieran influir en la demora de la aprobación o denegación de tu solicitud encontramos:

  • No recepción de evidencias. A veces, los hospitales o médicos tratantes tardan demasiado en enviar la evidencia médica de los casos de incapacidad al Seguro Social. Por eso te recomendamos que, si tienes tu historial a la mano, lo adjuntes al momento de enviar la planilla.
  • Consulta médica. En ocasiones, las pruebas y evidencias médicas no son suficientes y el Seguro Social solicita una evaluación aparte. Estas consultas son gratuitas, pero suelen demorar el trámite de los casos.

¿Cuáles son los casos de compasión del Seguro Social?

Un caso de compasión es aquel que se basa en el diagnóstico de una condición médica extremadamente rara o grave, mortal o no. En casos como estos, la Administración del Seguro Social suele acelerar la evaluación de la solicitud. Por tanto, un solicitante podría recibir noticias en apenas unos días, siendo el promedio de unas dos semanas.

Lista de enfermedades del seguro social

Por referencia, te dejamos las principales enfermedades catalogadas como casos de compasión, también conocidas como subsidios compasivos del Seguro Social:

  • Leucemia aguda
  • Cáncer suprarrenal con metástasis actual o a futuro
  • Cáncer inoperable con metástasis actual o a futuro
  • Linfoma
  • Enfermedad de Huntington
  • Síndrome de Aicardi-Goutieres
  • Enfermedad de Alexander
  • Síndrome de Allan-Herndon-Dudley
  • Holoprosencefalia alobar
  • Parkinson
  • Síndrome de Alstrom
  • Sarcoma de partes blandas
  • Trombocitopenia amegacariocítica
  • Angiosarcoma
  • Atresia aórtica
  • Anemia aplásica
  • Astrocitoma en Grado III y IV
  • Tumor teratoideo / rabdoide atípico
  • Enfermedad de Batten
  • Atrofia óptica bilateral mayor
  • Retinoblastoma bilateral infantil
  • Cáncer de vejiga con metástasis actual o a futuro
  • Cáncer de mama inoperable o no tratable con quimio
  • Enfermedad de Canavan
  • Carcinoma de origen desconocido
  • Amiloidosis cardíaca
  • Trastorno por deficiencia de CDKL5
  • Síndrome cerebro-óculo facio esquelético
  • Linfoma linfoblástico infantil
  • Pseudoobstrucción intestinal idiopática
  • Linfedema congénito del síndrome de Coffin-Lowry
  • Distrofia miotónica congénita
  • Síndrome de Cornelia de Lange – Forma
  • Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob
  • Síndrome de Dravet
  • Enfermedad de Alzheimer de inicio temprano
  • Síndrome de Edwards
  • Síndrome de Eisenmenger
  • Sarcoma del estroma endometrial
  • Fibrosis endomiocárdica
  • Ependimoblastoma
  • Enfermedad de Erdheim Chester
  • Cáncer de esófago
  • Estesioneuroblastoma
  • Sarcoma de Ewing
  • Enfermedad de Farber
  • Fibrodisplasia osificante progresiva
  • Cáncer fibrolaminar
  • Demencia frontotemporal
  • Síndrome de Fryns en adultos
  • Fucosidosis Tipo 1
  • Distrofia muscular congénita
  • Miocarditis fulminante
  • Galactosialidosis
  • Cáncer de vesícula biliar
  • Enfermedad de Gaucher
  • Neuropatía axonal gigante
  • Glioblastoma multiforme
  • Glioma de grado III y IV
  • Acidemia glutárica
  • Cáncer de cabeza y cuello con metástasis a distancia, inoperables o no tratables (en niños y adolescentes)
  • Fracaso de un transplante o injerto al corazón
  • Hidrocefalia
  • Fibrosis pulmonar idiopática
  • Cáncer de mama juvenil
  • Hemangiopericitoma intracraneal
  • Síndrome de Jervell y Lange-Nielsen
  • Síndrome de Joubert
  • Enfermedad de Huntington juvenil
  • Cáncer de riñón: síndrome de Kleefstra inoperable o no tratable
  • Enfermedad de Krabbe
  • Enfermedad de Kufs infantil
  • Cáncer de intestino grueso: con metástasis a distancia o inoperable, no tratable o recurrente
  • Lipofuscinosis neuronal infantil tardía
  • Enfermedad de Leigh
  • Leiomiosarcoma
  • Carcinomatosis leptomeníngea
  • Síndrome de Lesch-Nyhan (LNS)
  • Demencia con cuerpos de Lewy
  • Cáncer de hígado
  • Síndrome de Lowe
  • Granulomatosis linfomatoide Grado III
  • Gliomas malignos del tronco encefálico infantil
  • Ectomesenquimoma
  • Esclerosis múltiple maligna
  • Tumor rabdoide renal maligno
  • Linfoma de células del manto (MCL)
  • Síndrome de Marshall-Smith
  • Meduloblastoma con metástasis
  • Síndrome de hipoperistaltismo intestinal del microcolon de Megacystis
  • Síndrome de malformación capilar megalencefalia
  • Enfermedad de Menkes (Forma clásica o de inicio infantil)
  • Carcinoma de células de Merkel con metástasis
  • Distrofia muscular congénita deficiente
  • Atrofia
  • Osteosarcoma de tipo II , anteriormente conocido como cáncer de hueso
  • Cáncer de ovario con metástasis a distancia o inoperable
  • Cáncer de páncreas
  • Síndrome de Revesz
  • Rabdomiosarcoma
  • Síndrome de Richter
  • Síndrome de Roberts
  • Síndrome de Rubinstein-Taybi
  • Enfermedad linfoproliferativa ligada al cromosoma X
  • Miopatía miotubular ligada al cromosoma X
  • Xeroderma pigmentoso
  • Síndrome de Zellweger

Si quieres conocer toda la lista de enfermedades compasivas del Seguro Social, consulta esta sección especial de la página oficial de la SSA.

¿Mi enfermedad debe cumplir con todos los criterios médicos de la SSA?

No necesariamente. Una persona puede recibir beneficios complementarios sin que su afección o enfermedad cumpla con todos los requerimientos identificados en la Parte A o Parte B. En este caso, el evaluador considerará todos los síntomas del cuadro para ver si puede igualarlos con alguna enfermedad de la lista. De hecho, solo el 40% de los casos incluye una afección que coincide al 100% con las condiciones del Seguro Social.

¿Cómo puedo verificar el estado de mi solicitud del Seguro Social por incapacidad?

La forma más fácil de verificar el estado de tu solicitud es ingresando a la plataforma My Social Security. Si no puedes revisar el estado de tu solicitud en línea, puedes llamar al 1-800-772-1213 o TTY:1-800-325-0778 en el siguiente horario: de lunes a viernes, de 8:00 a. m. a 7:00 p. m.

¿Cuándo comienzan a pagar los beneficios por incapacidad?

Según el SSI, los beneficios se comenzarán a repartir tan pronto como sea posible, en especial si se trata de una persona con ceguera o limitaciones visuales graves. No obstante, generalmente hay un período de espera que va desde los 3-6 meses.

¿Los niños de un adulto discapacitado pueden recibir beneficios?

Sí. Todo niño menor a los 18 años puede recibir beneficios siempre que califique como dependiente. Estos beneficios suelen terminarse al cumplir 18 años de edad o al salir de la escuela secundaria.

Si el niño también sufre de una discapacidad -siempre que haya sido diagnosticada antes de cumplir los 22 años- puede ser elegible para recibir beneficios por su cuenta, especialmente si ha quedado huérfano o uno de sus padres ha fallecido. En este caso, no será necesario que el niño, ahora adulto, haya trabajado alguna vez (en caso que se trate del SSDI).

Los beneficios por incapacidad como hijo de un adulto discapacitado también pueden finalizar cuando este hijo se casa, aunque hay ciertas excepciones. Para más información sobre este tema, comunícate con un agente de la SSA llamando a los teléfonos: 1-800-772-1213 o 1-800-325-0778 (TTY).

¿Qué pasa con los beneficios por incapacidad cuando se alcanza la edad de jubilación?

Las personas que reciben una compensación económica SSDI del Seguro Social y cumplen 65 años de edad, automáticamente cambiarán su estatus de discapacitado a jubilado. Los que tienen 62 años pero menos de 65, pueden aplicar para una jubilación temprana, pero no es recomendable hacerlo, ya que se perderá un monto importante de los beneficios de jubilación.

¿Puedo recibir un suplemento estatal si califico para el SSI?

Sí, pero todo dependerá de tu estado de residencia. El suplemento estatal aumenta tanto el ingreso mensual permitido como los pagos recibidos por concepto de seguro suplementario. La mayoría de los estados del país trabajan con suplementos estatales a excepción de:

  • Texas
  • Georgia
  • Oregon
  • Arizona
  • Arkansas
  • Mississippi
  • Tennessee
  • West Virginia

¿Cuánto podría recibir como suplemento estatal si me pagan SSI?

Si vives en alguno de los estados que trabajan con suplementos estatales, podrías esperar a recibir desde $10 hasta $400 adicionales al pago de la SSA.

¿Cómo prepararme para mi entrevista de discapacidad?

La mejor forma de prepararte para tu entrevista de discapacidad con la SSA es teniendo toda la información de tu caso a la mano. Asegúrate de anotar las fechas en las que trabajaste por última vez, los datos de contacto de tus últimos empleadores y los nombres de todos los medicamentos que estás tomando.

Si estás solicitando el SSI, te conviene también sumar todas las fuentes de ingresos que tú o tu cónyuge tengan, cuánto gastas mensualmente en el mantenimiento del hogar y en tu mismísima enfermedad, y cuál es el saldo de tus cuentas bancarias.

¿Qué ingresos debo reportar al Seguro Social si recibo el SSI?

Toda persona que reciba el beneficio del Seguro Social por Incapacidad SSI, debe reportar la cantidad de ingresos que percibe mensualmente cada vez que esta cambie. Esto incluye ingresos adicionales por hacer un trabajo desde casa o a medio tiempo, los ingresos de su cónyuge y cualquier otra ayuda económica que se reciba. Te dejamos una tabla ilustrativa con el tipo y el detalle de los ingresos que deberías reportar a la SSA:

Ingresos que se deben reportar al Seguro Social para no perder los beneficios del SSI
Ingresos laborales propios Ingresos laborales de la familia o ayudas de terceros
Ganancias percibidas por cualquier tipo de empleo. Debes incluir la fecha de inicio de la actividad, el monto del ingreso, la frecuencia de pago, la fecha de egreso y los cambios en la paga. Ingresos percibidos como ayuda económica por cualquier miembro de la familia o cambio de la situación económica de tu cónyuge o hijos. Debes incluir el tipo de ingreso, la cantidad recibida, la frecuencia en la que se recibe y la fecha de inicio y finalización del ingreso extra.

¿Cómo reportar ingresos mensuales nuevos a la SSA?

Si recibes un ingreso extra y eres beneficiario de SSI puedes reportar tu cambio de situación económica llamando al número gratuito del Seguro Social: 1-800-772-1213 o TTY 1-800-325-0778. También tienes la opción de visitar la oficina del Seguro Social más cercana a tu domicilio.

Te aconsejamos hacer el reporte tan pronto como comiences a recibir otros ingresos o ante cualquier cambio que modifique los que ya has reportado con anterioridad. Tienes hasta 10 días contados a partir del mes siguiente al cambio para informar al Seguro Social y no perder tus beneficios.

¿No sabes qué tipos de ingresos se deben notificar a la SSA cuando se recibe un ingreso suplementario? Te dejamos una lista de los más comunes. Consúltala con calma para identificar si alguno de estos se ajusta a tu caso particular:

  • Pagos por horas extra o bonificaciones
  • Asistencia económica para refugiados
  • Ayudas monetarias en caso de catástrofes
  • Ayudas monetarias por niños especiales
  • Pensiones, subsidios y pagas por la baja
  • Prestaciones de jubilación
  • Regalías por derechos de autor
  • Regalos, obsequios y donaciones
  • Ingresos por el alquiler de una propiedad
  • Premio de lotería o juegos al azar
  • Pensión alimenticia
  • Manutención de los hijos
  • Herencias de bienes o en efectivo
  • Pago de una póliza de seguro de vida
  • Cualquier otro ingreso o ayuda similar a los mencionados

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Sobre el autor

Jessica, abogado corporativo y especialista en finanzas, realiza investigaciones a diario para acercarte a la seguridad y libertad financiera (aunque apenas estés comenzando). Sus +600 artículos publicados en Créditos en USA —y su propia experiencia como migrante— ya han ayudado a miles de hispanos en Estados Unidos.

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