Un seguro de vida es un contrato entre una compañía de seguros y una persona, que se compromete a pagar una cantidad de dinero a la aseguradora para que ésta, al momento de su fallecimiento, pague un monto a los beneficiarios designados.
El principal propósito es que ese dinero ayude a los beneficiarios a cubrir gastos funerarios, pagar deudas, reemplazar los ingresos perdidos por el fallecimiento o dejar un margen económico que les permita reorganizar su vida después de la pérdida.
En este artículo conocerás qué es un seguro de vida y para qué sirve, los tipos de póliza que existen, qué situaciones cubren, los costos y factores que influyen en el valor de las primas, así como el proceso para reclamar el cobro de una póliza.
Productos de seguro de vida
Aunque existen distintos tipos de seguro de vida, hay dos principales:
- Seguro de vida a término
- Seguro de vida permanente
Seguro de vida a término
Es mucho menos costoso que otros seguros de vida debido a que no está diseñado para durar hasta la vejez, cuando las primas del seguro de vida son más caras. Además, no tiene un componente de ahorro o inversión que acumule valor con el tiempo.
Existen tres tipos:
- Decreciente. El beneficio por muerte disminuye con el tiempo. Se usa normalmente para garantizar el saldo restante de un préstamo amortizable, como una hipoteca o un préstamo comercial.
- Convertible. Tiene la opción de convertirse en una póliza permanente en ciertos momentos del plazo o al finalizar, y no requiere un nuevo examen médico. El beneficio por muerte se mantiene, pero la prima aumenta.
- Renovable. Puede renovarse por otro plazo igual al finalizar el plazo inicial o en ciertos momentos. Tampoco necesita un nuevo examen médico, el beneficio por muerte se mantiene y la prima puede aumentar. Se usa para obtener una cobertura continua sin comprometerse con una póliza permanente.
Seguro de vida permanente
Es más caro y más complejo que el seguro a término (que es una mejor opción para quienes tienen necesidades finitas de protección). El seguro permanente es más adecuado cuando se quiere dejar un legado, proteger un patrimonio o planificar una sucesión.
Existen dos tipos principales de seguro de vida permanente:
- Seguro de vida entera. Tiene un valor en efectivo que crece a una tasa garantizada y ofrece cobertura por toda la vida del asegurado. Las primas son fijas y el beneficio por fallecimiento es constante.
- Seguro de vida universal. Ofrece cobertura por toda la vida y un valor en efectivo que puede variar según las tasas de interés del mercado. Las primas y el beneficio por fallecimiento son flexibles y se pueden ajustar según las necesidades. Existen dos variantes:
- Indexado. El valor en efectivo puede crecer según el rendimiento de un índice bursátil elegido por el asegurador, tiene una tasa de interés mínima garantizada, pero también puede tener un límite máximo.
- Variable. El valor en efectivo se puede invertir en subcuentas que funcionan como fondos mutuos. No tiene garantía y depende del rendimiento de las inversiones elegidas por el asegurado, quien asume el riesgo de inversión.
¿Qué cubre un seguro de vida?
La cobertura de un seguro de vida depende del tipo de póliza que se contrate, de las condiciones específicas de cada compañía y de las circunstancias de la muerte del asegurado.
En general, una póliza de vida cubre la muerte de su cliente por cualquier causa, siempre que se cumplan los requisitos establecidos en el contrato y no se incurra en ninguna de las exclusiones que pueda tener la póliza.
Algunas de las causas más comunes de muerte que suelen estar cubiertas por un seguro de vida son:
- Muerte natural. Ocurre por el deterioro orgánico o el envejecimiento del asegurado, o por una enfermedad que no sea preexistente o no declarada al momento de contratar el seguro.
- Fallecimiento por accidente. Causado por un factor externo, súbito, violento e involuntario, como un accidente automovilístico, una caída, un incendio, una electrocución o una asfixia.
- Defunción por enfermedad grave. Provocada por una condición médica con alta probabilidad de mortalidad, incluída en la lista de enfermedades graves que cubre la póliza: cáncer, infartos, ictus, insuficiencia renal o trasplante de órganos.
Posibles inconvenientes en la cobertura
Existen algunos tipos de muerte que no están cubiertos por un seguro de vida o que pueden generar inconvenientes al momento de intentar cobrar la póliza. Entre ellos están:
- Suicidio. Muchas aseguradoras excluyen el pago del beneficio si el asegurado se suicida dentro de los primeros dos años de haber contratado la póliza. Pasado ese período, el suicidio suele estar cubierto.
- Homicidio. Ante un asesinato, los beneficiarios recibirán el dinero de la póliza siempre que no se sospeche que participaron en el crimen. Si es así, la compañía de seguros puede retener el pago hasta que se aclare la situación legal.
- Muerte por enfermedad preexistente. Algunas compañías se niegan a pagar si el asegurado muere por una enfermedad que ya tenía y no declaró al momento de contratar la póliza. Si el asegurado reveló su condición y la compañía aceptó cubrirlo, el beneficio se paga normalmente.
- Fallecimiento en el exterior. Algunas pólizas tienen cláusulas de restricción geográfica y no cubren la muerte del asegurado en otro país. Esto puede deberse a razones políticas o sanitarias, o a consideraciones de riesgo e ilegalidad.
Costos de un seguro de vida
Las tarifas varían significativamente según el tipo de seguro; la duración del término; la cantidad de cobertura; la edad, género y estado de salud del asegurado, así como su ocupación, pasatiempos e historiales financieros, criminales y de conducción.
Estos costos se obtienen con base en una situación muy específica. Es importante determinar tu situación, comparar cotizaciones de diferentes compañías y elegir la opción que mejor se adapte a tus necesidades y presupuesto.
¿Qué hay que hacer para cobrar la póliza?
Para cobrar el beneficio por fallecimiento, debes conocer la aseguradora con la que se contrató la póliza, el número de contrato y el nombre del asegurado, datos que encuentras en el contrato del seguro.
Luego, deberás completar, firmar y presentar el formulario de reclamo de beneficios por fallecimiento de la compañía y enviar una copia certificada de la partida de defunción, que puedes solicitar a la funeraria o al Departamento de Salud Pública estatal.
La compañía de seguros revisará el reclamo y verificará la validez de la póliza y la causa de la muerte. Si todo está en orden, el o los beneficiarios recibirán el dinero en un plazo que puede variar según el estado y la compañía.
¿Cuánto se cobra por un seguro de vida por fallecimiento?
Los montos que los beneficiarios cobran en concepto de “beneficio por fallecimiento” son muy variados y cambian según la distinta combinación de factores bajo los que se contrató la póliza, por eso no es posible indicar un promedio.
El beneficiario de una póliza normalmente recibe todo el dinero del seguro de vida sin pagar impuestos, pero hay algunas situaciones en las que puede recibir menos o tener que tributar.
¿Qué pasa si no se paga un seguro de vida?
Si tienes un seguro de vida a término, la cobertura caducará. Si tienes un seguro de vida permanente, puede haber opciones para mantener la cobertura usando el valor en efectivo de la póliza, reduciendo el beneficio o convirtiéndola en una póliza a término.
Puedes intentar restablecer la póliza contactando con la compañía de seguros y pagando los pagos atrasados más los intereses, pero es posible que haya requisitos adicionales, como un nuevo examen médico o una nueva solicitud.
¿Te devuelven el dinero cuando das de baja un seguro de vida?
Depende del tipo de póliza contratada. Si tienes un seguro de vida a término, no recibirás ningún reembolso al cancelar la póliza antes del plazo. Si tienes un seguro permanente, hay algunas opciones para recuperar parte del dinero que pagaste. Consulta con tu aseguradora.
¿Cuáles son las desventajas del seguro de vida?
El seguro de vida no se convierte fácilmente en efectivo, lo que puede hacerte perder dinero o pagar cargos si cancelas la póliza o intentas acceder al valor en efectivo. Además puede ser muy costoso si eres mayor, tienes mala salud o un hobbie de riesgo.
Hay una gran variedad de opciones, condiciones y exclusiones alrededor de los seguros, lo que los hace complejos y habilita la posibilidad de fraudes o estafas. Verifica siempre la reputación de la aseguradora.