El 86% de los negocios latinos en Estados Unidos han adoptado modelos de inteligencia artificial para optimizar sus operaciones y aumentar la productividad, de acuerdo con una investigación llevada a cabo por Intuit Quickbooks.
Los datos demuestran que la población empresarial hispana en Estados Unidos se encuentra adelantada en la adopción de modelos de inteligencia artificial para los negocios.
Según datos de Exploding Topics, al menos la mitad de las empresas del mundo han anunciado sus planes de incorporar inteligencia artificial en el año 2023.
¿Para qué usan la inteligencia artificial los negocios latinos en Estados Unidos?
La investigación señaló que actualmente los negocios latinos usan la inteligencia artificial para:
1) Análisis de datos
2) Atención al cliente
3) Inspiración creativa
Los usos que le dan los negocios latinos a la inteligencia artificial no difieren demasiado de la media.
El portal Forbes indicó que al menos 56% de los negocios usan inteligencia artificial para mejorar la experiencia de atención al cliente.
Otros de los usos que Forbes ha encontrado para la inteligencia artificial en los negocios estadounidenses son:
1) Ciberseguridad y manejo de fraudes
2) Asistencia personal digital
3) Manejo de la relación con los clientes
4) Manejo de inventarios
5) Producción de contenido
6) Recomendaciones de productos
7) Contaduría
8) Operaciones de la cadena de suministros
9) Reclutamiento de personal
10) Segmentación de audiencias
Cabe acotar que incluso las agencias de préstamos y los bancos están usando la inteligencia artificial para determinar quiénes pueden o no acceder a determinados créditos.
¿La inteligencia artificial esconde peligros para los negocios?
Aunque aún es demasiado pronto para evaluar los peligros que supone la inteligencia artificial en los negocios, ya se han asomado las primeras alarmas de parte de instituciones federales.
Por ejemplo, Gary Gensler, director de la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés), advirtió que la inteligencia artificial causará una crisis financiera en la próxima década. Y uno de los desafíos en torno a estos modelos tecnológicos es la falta de regulación, pues cada institución o negocio la usa de manera particular.